Este 28 de enero se inicia según el calendario chino un nuevo año y está dedicado al gallo. Es considerado el signo de la madrugada y el despertar por lo que el triunfo y el éxito solo se podrán lograr a costa de mucho trabajo e infinita paciencia. El Año del Gallo está sujeto al elemento Fuego en su forma yin, el cual expresa la calidez y la visión interior, así como el desarrollo de las relaciones íntimas y familiares. Pensamientos olvidados surgen repentinamente, en medio de un ambiente desconcertante, un tanto rígido y abigarrado. Los Años del Gallo son tiempos de rectitud y de justicia, de grandilocuencia y de logística eficiente. Puestos de trabajo de la administración pública y privada, carreras o puestos de trabajo de la policía y del ejército son favorecidos a quienes han nacido bajo ese signo. A diferencia de la mayoría de los otros elementos del zodíaco chino, el Gallo, como la Rata y el Conejo, están representados por un único elemento, mientras que todos los demás contienen varios elementos ocultos en ellos. Por lo tanto, los años regidos por estos tres signos dependen fuertemente de la fuerza inicial del elemento al que están unidos inicialmente. A pesar de los ciclos de rotación de los meses, las estaciones y los días continuamente aportan diversidad al flujo de energía de los 5 Elementos (Wu Xing), la presencia de un elemento predominante que rige el ciclo anual nunca se ve como el mejor de los augurios en la tradición china. Al igual que el Feng Shui también nos enseña, el equilibrio de poder entre les cinco elementos generan felicidad y plenitud. La falta de diversidad energética generado por un elemento dominante durante un Año Nuevo - sea del Gallo, del Conejo o de la Rata - intensifican la perturbación de la fuerza cíclica del tiempo con aquellos inherentes a cada signo de la astrología china. Por lo tanto, durante un Año del Gallo, es recomendable mantenerse en guardia antes de considerar la posibilidad de un retorno rápido y fácil de una inversión en nuevos proyectos empresariales. Teniendo en cuenta la distribución de la energía de los 5 elementos a lo largo del año, lo mejor es comenzar tus proyectos en el otoño o durante las dos últimas semanas de cada temporada. De hecho, los períodos de temporadas finales están representados por el elemento Tierra, muy importante y útil para sus virtudes de estabilización, en particular durante los años del Gallo de Fuego. La combinación del elemento Fuego de este año con el elemento Metal, intensifica las tensiones con los demás deficiencias energéticas, creando unos tiempos no aptos a los cambios. Si no tienes pareja, 2017 es un año perfecto para iniciar una nueva relación. Sin embargo, las relaciones que habrían sido capaces de desarrollarse con el tiempo serán acortadas por razones ajenas a tu voluntad: por ejemplo, una instalación en otra región o incluso en otro continente. Si esperas ser padre durante el año del Gallo de Fuego, recuerda que un nacimiento en el heraldo de primavera será una indicación de un temperamento menos irritable para tu pequeño Gallo. Para ti, si la perspectiva de tener un hijo con un carácter orgulloso y extravagante no es una buena noticia, por lo que sería conveniente esperar hasta el 2018, que es el Año del Perro y podrás esperar la llegada de un niño inteligente y hábil, quién siempre (y con razón) tendrá la última palabra con sus padres. A pesar de las tensiones y desequilibrios que dominaran en el 2017, este año es paradójicamente auspicioso para las bodas. También no olvides que el rojo (color del elemento Fuego) es el color tradicional del vestido de boda para los chinos y en otros países asiáticos, mientras que el color blanco simboliza el luto. Aparte de la naturaleza conflictiva que el año hizo posible gracias a la presencia dominante, opuesta y contradictoria del Metal y del Fuego, existen corrientes positivas a lo largo del 2017, aunque no se aplican a todos los signos el zodiaco chino. Esta Fusión del Metal con el Fuego provoca una atmósfera eléctrica en el mundo que será una fuente de tensión para todos. Asimismo, la migración causada por las guerras y el cambio climático contribuyen a un clima político ya de por si en deterioro e inestable, con mayor razón cuando entre los ‘refugiados’ se esconden terroristas en potencia listos para desatar el terror en Occidente, por lo que lo lógico sería blindar las fronteras para evitar su llegada. En cuanto al empleo. La inversión y los negocios, un nacido bajo el Año del Gallo esta marcado con el éxito para los que han realizado un proyecto empresarial con paciencia, y a menudo en solitario. No olvidéis que este año quedará bajo la protección de un signo fabuloso y extravagante, cuyas virtudes de justicia, de perseverancia y de transparencia pueden recompensar generosamente a aquellos que lo entienden suficientemente bien.
